Había una tribu que se llamaba Saurón. Todos los habitantes de la tribu necesitaban comida.
Un día una tribu diferente fue a atacarles. Los saurones con el hambre que tenían no podían luchar, entonces huyeron mientras la otra tribu destruía su aldea.
El jefe Saurón, les dijo a los saurizonios:
-Vamos a hacer casas más grandes y resistentes que unas cabañas. ¿Porqué no hacemos casas, coches y objetos?
Y todos dijeron
- ¡¡Si , coches, casas, espadas!!
Y uno dijo: - ¡¡Pasteles ¡!
Todos le miraron de una forma rara y empezaron a construir. Construyeron lo primero cosas para poder comer y lo segundo que hicieron fueron tanques, aviones y barcos de guerra para poder acabar con la tribu que les destruyo la aldea.
Cuando fueron a atacar a la tribu enemiga, vieron que les habían copiado, porque tenían también aviones, tanques y barcos. Pero los saurizonios sabían que con destruir la casa central (el ayuntamiento), se destruiría todo y eso no lo sabían los de la otra tribu. Lo malo era que ellos tenían los tanques, aviones y barcos más potentes.
¡Empieza la batalla! Los saurizonios van directamente al ayuntamiento, los de la otra tribu fueron primero a por las casas. Los saurizonios seguían atacando, pero la otra tribu tira una bomba a sus aviones, barcos y tanques y todos los derribaron. Los saurizonios dejaron el ayuntamiento a un toque, entonces pasó una mosca y se chocó contra el edificio. Se derrumbó todo! Los aviones, las casas, los barcos y los tanques, todo explotó.
Los saurizonios se pusieron muy contentos al ver el edificio explotar. Después de eso, cocinaron de todo, pollo, patatas, chuletas y hasta un pastel para el que lo pidió.
A la mosca la cogieron y se la llevaron de mascota y le dieron un trocito de carne y su vaso era un tapón de la botella de champán.
Y colorín colorado la tribu Saurón ha ganado.
